Aunque pique un poco, Kevin O’Connor, periodista de The Ringer, nos quintuplica en su comunidad de Twitter en cuanto a número de seguidores. Notoriedad merecida y ganada a pulso, por otra parte, y por ello sus análisis no deben ser contemplados como vistosos anzuelos en busca del clic.
Con sus patinadas, como todos –como cuando anunció a Killian Hayes como el mejor prospect de su Draft–, en sus estudios al pormenor de cada joven promesa que se cierne sobre la liga, suele salir ganador. Y hoy ha decidido sumarse a la genuflexión global que ha sucedido al debut de Izan Almansa con su nuevo equipo, el Ignite de la G League, granja de nuevo cuño de futuros talentos.
Sólo ha sido un amistoso, con los Perth Wildcats como rivales, pero el sabor de boca, por encima de los números, ha sido inmejorable. 14 puntos, 9 rebotes, 3 asistencias y 3 robos para mostrar una generosa variedad de su amplio arsenal.
Izan Almansa.
— NBASpain (@NBAspain) September 7, 2023
Lo mejor en su estreno con @gleagueignite.
🥰🥰🥰 pic.twitter.com/GdqRVXcj5w
Sin embargo, el aplauso de O’ Connor ya venía de antes. El español dio su nombre a conocer al mundo entero al proclamarse MVP del Mundial sub-19, y hace una semana, y atreviéndose con una temprana mirada al Draft 2024, donde el baile de nombres es constante aún, O’ Connor colocó a Almansa como un candidato al top-3.
En esto, le dedicó la siguiente diagnosis:
«Almansa destaca como un ancla ofensiva con manos magnéticas sobre el cristal. Brilla en la creación de jugadas en los codos y al poste, no sucumbiendo a las defensas dobles en su labor de localizar al tirador abierto, y ejecutando hábilmente el handoff. Almansa es un elegante anotador de poste, a menudo dejando boquiabiertos a los defensores con su repertorio de giros y ganchos. Es bueno poniendo bloqueos y un roller diligente, que cuenta con buen toque en la finalización, además de un poderoso mate. Su potencial como lanzador de tres es palpable, pero por ahora, se queda como algo pendiente debido a su escasa eficiencia en triples y tiros libres. Aun así, Almansa tiene el talento suficiente para prosperar aún más como jugador de ataque y convertirse en un reboteador de élite, que además puede ofrecer una defensa versátil en cualquier sistema. Con sus 2,08 metros y sus 98 kilos, es algo pequeño para luchar contra pívots grandes u ofrecer una resistencia significativa como defensor al poste, por lo que es fundamental que continúe progresando en la G League como una pieza móvil».
Un gran partido en su noche de estreno, claro que sí. Pero al fin y al cabo, sólo uno más de sus tantos miles de pasos en la búsqueda del sueño. Jugar y triunfar en la NBA.