Las nuevas restricciones para los equipos que sobrepasen en exceso el límite del impuesto de lujo han obligado a muchas franquicias a replantearse su estructura salarial para tratar de evitar dichas sanciones. Y los Warriors, como organización que más gasta en salarios de la liga, han tenido que plantearse realizar algún traspaso con el que empezar a liberar parte de su masa salarial. No obstante, Anthony Slater, periodista de The Athletic, afirma que los californianos han decidido que no harán tal cosa, y que, dado que esta nueva norma no empezará a aplicarse hasta la temporada 24-25, será el año que viene cuando afronten el problema.
Muchas miradas se habían posado recientemente sobre Jordan Poole, pues, tras sus decepcionantes playoffs, es inevitable mirar con recelo a su contrato de 128 millones en cuatro temporadas que entrará en vigor este año. Rumores recientes señalaban que el escolta era el gran candidato a salir si Golden State optaba por vaciar su cap, pero finalmente parece que los planes de la franquicia no pasan por esta vía. Slater señala, sin embargo, que esto no significa que los Warriors descarten dar salida a Poole, pero afirma que solo lo harían si creen que el movimiento mejora la plantilla, no pensando en las restricciones salariales.
Parte de la clave de esta decisión tiene que ver con el contrato de Klay Thompson, que finaliza en 2024. Incluso si continúa en el equipo, nada apunta a que vaya a firmar una cifra similar a los 43 millones de dólares que cobrará este próximo curso, lo que permitiría a los de San Francisco reducir el gasto por ese lado. Además, aún están pendientes del futuro de Draymond Green, y aunque parece que el ala-pívot seguirá en el equipo, las condiciones de su hipotético nuevo contrato marcarán también la hoja de ruta del verano que viene.
(Fotografía de portada: Ezra Shaw/Getty Images)