Datos en la NBA hay incontables para hablar de todos los jugadores que la componen, y más en concreto de las estrellas de la misma. Sin embargo, queremos aprovechar la suspensión de la NBA para indagar en aspectos de estos grandes jugadores que nos acerquen a un lado más personal y curioso de los mismos que quizás desconocías.
Hoy, al igual que hicimos la semana pasada con Reggie Miller, hablamos de un jugador retirado que puede ser tildado sin lugar a dudas como leyenda de la Liga: Kevin Garnett. Saltando directamente del instituto a la NBA, y con una enorme carrera en la que jugó con Minnesota Timberwolves, Boston Celtics y Brooklyn Nets, ahora hablamos de algunos aspectos y anécdotas de su carrera que han quedado en segundo plano.
Prefería medir un poco menos. Parece una incongruencia, pero así es. Kevin Garnett creció hasta los 2,11 metros (con botines 2,13) algo que debía ser una ventaja para su carrera –y lo fue– pero con lo que no estaba del todo contento; tanto es así que cuando técnicos y compañeros le preguntaban por su altura nunca decía más de 2,10 metros. Según contaba Sam Mitchell, quien fue su técnico, Garnett decía que no quería ser tan grande porque le asignarían desde el principio de su carrera a jugar de pívot. Otro de sus mentores, Flip Saunders, señala que irónicamente solía llamarlo un 6’13, ya que no le gustaba ser un 7 pies.
Reivindicativo. Mayo de 1994 marcó un antes y un después en el inicio de la carrera de Garnett. Tras pasar tres años en el instituto de Mauldin, justo en esa fecha se vio envuelto en una pelea con tintes raciales en la que un chico blanco acabaría en el hospital mientras que cinco negros, entre ellos él, fueron arrestados. Todos acabaron saliendo en libertad sin cargos, pero ello no evitó que la noticia se extendiese por el estado, Carolina del Sur. Instado a entrar en un programa de reinserción y viendo que el instituto lo eliminaba de sus récords, Shirley Garnett, su madre, optó por mudarse con toda la familia a Chicago. Kevin acabaría en la Admiral Farragut Academmy de Illinois, donde promediaría 25,2 puntos, 17,9 rebotes, 6,7 asistencias y 6,5 tapones antes de dar el salto a la NBA.
Anuncios. Su popularidad se disparó nada más aterrizar en la NBA. Pese a estar en un pequeño mercado como Minnesota, su talento habló en la cancha hasta el punto de ser elegido como imagen de numerosas marcas. Entre las que patrocinó en televisión se encuentran Nike, marca con la que firmó nada más saltar a la NBA desde el instituto; NBA 2K, videojuego del que ha sido imagen; y más recientemente de Beats by Dre, conocida marca de auriculares.
Solidario. Después de que el huracán Katrina arrasase parte del sudeste de Estados Unidos a su paso por Florida y Luisiana, muchas fueron las muestras de solidaridad entre la población estadounidense, y entre ellas no faltó la de Kevin Garnett. El por entonces jugador de Minnesota realizó una donación de 1,2 millones destinados a la construcción de casas. Esta acción, unida a otras de la misma índole, le llevaron a recibir por parte de la NBA el premio «J. Walker Kennedy Citizenship» por su servicio y dedicación a la comunidad.
Consejero de moda. Corría el año 2009 cuando Craig Sager, respetado reportero de TNT que acostumbraba a llevar americanas y corbatas muy llamativas hasta su fallecimiento en 2016, estaba realizando una entrevista a Kevin Garnett. En un momento dado el 14 veces All-Star cortó la conversación para aconsejarle que nada más llegar a casa quemase el traje que llevaba. Ese era el humor de KG. Sager por supuesto no le hizo caso y siguió vistiendo exactamente igual.
Muy cerca de jugar en Lakers. 2007 fue un año muy importante en la carrera de Kevin Garnett. Tras 12 campañas jugando para los Wolves, su necesidad de poder ganar le llevo a decidir que cambiaría de aires. Como todos sabemos acabaría en Boston Celtics, donde sería campeón en 2008. Sin embargo, esa historia pudo ser muy diferente si hubiese optado por firmar con los Lakers, algo que según contó él mismo de ‘The Dan Patrick Show’ de ESPN, estuvo muy cerca de ocurrir. «Fue en verano de 2007. Había ciertas disputas entre Kobe Bryant y Phil Jackson, lo que hacía que la situación fuese algo incierta, por lo que me decanté por los Celtics. Para ser honesto, el fichaje por los californianos se quedó a muy poco de hacerse efectivo».
Sangre, sudor y lágrimas. ¿Qué definía a Kevin Garnett sobre la pista? Una intensidad que pocos o ninguno –dependiendo del rival– podían igualar. Su esfuerzo sobre la cancha siempre llegaba al límite, y cuando eso sucedía, iba más allá para superarlo. Esa cualidad de su juego la convirtió en una lema sobre su piel, en la cual se hizo un tatuaje que dice «Blood, Sweat and Tears»; es decir, sangre, sudor y lágrimas. Tres palabras para dejar claro qué significaba Garnett sobre el parqué.
En el cine. Deportistas que han tenido apariciones en la gran campaña ha habido bastantes, pero no tantos con una papel relevante o que haya recibido buenas críticas. Eso es justo lo que ha conseguido Kevin Garnett con su papel en la película ‘Uncut Gems’ (Diamantes en bruto) en la cual se interpreta a sí mismo mientras disputa una importante temporada con los Boston Celtics. Su actuación en este filme de los Hermanos Safdie en el cual comparte cartel co Adam Sandler, dista mucho del cameo que tuvo en American Pie 2.
Fue el mejor pagado de la NBA. El impacto de Kevin Garnett en la Liga fue tremendo; tanto es así que en 1998 firmó un inmenso contrato de seis años y 126 millones de dólares. Esas cifras hoy serían algo habitual para jugadores de primera línea de cualquier equipo, pero en aquel momento situaron a la estrella de Minnesota como el jugador mejor pagado de la NBA entre los años 2000 y 2004 superando a otros como Shaquille O’Neal.
El mismo dentro y fuera de la cancha. En algunas ocasiones se ha comentado que Garnett interpretaba un papel cuando se enfadaba o mostraba una intensidad sobre la pista que podía parecer desmedida. Para corroborar que KG era el mismo tanto dentro como fuera de las pistas, Tyronn Lue contó hace años algo que les pasó estando juntos en su casa. «Mucha gente dice que su forma de ser en la cancha es teatro, pero es que es así. Un día estábamos viendo juntos el show de ‘Puff Daddy’s Making the Band’ y había una escena en la que los chicos cantaban y competían. Se volvió loco. Empezó a gritar y a chillar ‘tienes que luchar, tenéis que hacerlo juntos’. Se volvió loco sudando y golpeando la pared», recalca sobre la personalidad de Garnett.
¿Lo sabías todo? ¿Qué es lo que más te ha sorprendido? En las próximas fechas seguiremos con estas entregas personalizadas en algunos de los jugadores de la NBA para conocerlos más allá del enorme talento que muestran sobre las pistas. Historias y características que hacen de ellos personajes aún más únicos.
(Fotografía de Bruce Bennett/Getty Images)