Las Qualifying Offers u ofertas cualificadas están destinadas a los jugadores que salen de su contrato de novato y permiten a sus franquicias cierto margen de actuación en el caso de querer retenerlos y renovarlos.
Una Qualifying Offer ha de ser extendida por la franquicia entre el día después del último partido de las Finales de la NBA y el 29 de junio. En ese periodo, el equipo debe ofrecer al jugador una oferta por un año más, tras lo cual sería agente libre sin restricciones. No obstante, una oferta cualificada no significa necesariamente que el equipo desee renovarlo ni que el jugador esté obligado a firmarla. Con la Qualifying Offer, una franquicia se está guardando el derecho tener la última palabra en el futuro del jugador. Y este, en el caso de que todo vaya mal en el mercado, se asegura la garantía de poder tener trabajo un año extra por más del salario previo percibido.
Hay diferentes escenarios y contextos según la trayectoria del jugador al que se le extienda esta oferta, pero siempre está destinada a aquellos que salgan de su contrato de novato, ya vengan del ciclo completo de la escala de rookie (4 años) o su primer acuerdo como profesional en la NBA haya sido de un curso.
El derecho de tanteo
Esa última palabra que tienen los equipos en el porvenir de los jugadores a los que ofrece una Qualifying Offer es conocida como el derecho de tanteo. Durante el tiempo que una Qualifying Offer está sobre la mesa pero no es firmada por el jugador, este es agente libre restringido y puede aceptar propuestas de otros equipos. Si se da esa situación y firma con otra franquicia, su antiguo equipo dispone del derecho de tanteo, de 48 horas para igualar esa oferta y retener al jugador. Es simplemente una opción, no una obligación.
Los New York Knicks fueron un buen ejemplo de esta situación durante el verano de 2017. Así, ofrecieron a Tim Hardaway Jr. un contrato por 4 años y 71 millones dólares. Los Hawks, su antiguo equipo y que le habían extendido una Qualifying Offer, tenían 48 horas para acudir al derecho de tanteo, de igualar la propuesta del jugador y retenerlo. No lo hicieron y Hardaway Jr. pasó a convertirse en miembro de los Knicks.
En el caso de Hardaway Jr., hablamos de un jugador que salía de sus cuatro años de escala salarial de novato. Pero ese verano de 2017 también nos dejó casos diferentes en lo que respecta a las Qualifying Offer. Sin movernos de New York, el jugador no elegido en el Draft, Ron Baker, culminaba en junio de 2017 su primer año en la NBA. Baker había jugado por el mínimo salarial y los Knicks decidieron extenderle una Qualifying Offer. Más tarde, el base suscribió un acuerdo por dos temporadas y 8,9 millones de dólares. Es decir, no renovó bajo las premisas de la Qualifying Offer, que para un jugador de sus características, es decir, alguien que no venía de los cuatro años de contrato rookie, era de un 125 por ciento más de su último salario.
Hemos visto dos casos de Qualifying Offer no materializadas por una u otra razón. Sin embargo, la agencia libre de 2017 nos dejó algunas muestras de Qualifying Offer aceptada por el jugador, aunque no fueran sus planes iniciales. Fue el caso de Nerlens Noel. Tras unos meses de tiras y aflojas, Noel firmó la Qualifying Offer extendida por los Mavericks, por un poco más de 4,1 millones para la 2017-18. Hubo muchos rumores de que el jugador buscaba siempre más dinero, pero la falta de un acuerdo satisfactorio le hizo aceptar los 4,1 de los Mavericks y firmar esa oferta cualificada. Noel puede que pierda dólares en la 2017-18, pero la ventaja de suscribir una Qualifying Offer radica en que sólo es para un curso y, tras ella, el jugador es agente libre sin restricciones. Libertad a cambio de algo de dinero.
Nikola Mirotic apuró sus vías y finalmente renovó con los Bulls por más de lo que su oferta cualificada decía: 27 millones y dos campañas. Eso sí, en contraprestación, el español ingresaría más dólares pero se ata a un contrato más prolongado con Chicago del que hubiera tenido si hubiera sellado la Qualifying Offer, que le habría reportado 6,41 millones con vistas a la 2017-18.
Las Qualifying Offers caducan el 1 de octubre si no han sido firmadas por el jugador, aunque está la posibilidad de que pueda ser prorrogada hasta el 1 de marzo por parte de la franquicia, como fecha límite. Si la Qualifying Offer no es retirada ni aceptada por el jugador, ya sea en los plazos del 1 de octubre o el 1 de marzo, este sigue siendo agente libre restringido y debe negociar un contrato con su equipo. Por tanto, estas fechas no limitan la capacidad de negociar contratos con su última franquicia, sino que simplemente marcan un calendario para que el jugador firme la Qualifying Offer.
El 1 de marzo también es la fecha que tiene un agente libre restringido para aceptar propuestas de otros equipos. Pasada esa fecha, la única opción es la de renovar con su última franquicia o permanecer sin equipo NBA todo lo que queda de curso. Es decir, si Hardaway Jr. no hubiera aceptado la propuesta de los Knicks pasado el 1 de marzo de 2018, su única opción habría sido volver a los Hawks o estar sin equipo NBA hasta el final de la 2017-18.
Una Qualifying Offer firmada y aceptada está completamente garantizada.
‘Starting criteria’
Un jugador candidato a firmar una oferta cualificada puede ganar más o menos dinero con dependiendo del starting criteria. Quien alcance los 41 partidos de titular y más de 2.000 minutos sobre la pista en el último curso o en lo haga en el promedio de los dos últimos, cumple los requisitos del starting criteria. Como los salarios de las primeras rondas del Draft están determinados por sus posiciones en esta ceremonia, la Qualifying Offer se ajusta a esa premisas y recoge la posibilidad de ser más cuantiosa si el interesado cumple los citados parámetros del starting criteria. Por poner un ejemplo: un primer ronda que ha sido elegido en el número 11 del Draft y que cumpla con el starting criteria, optará a una oferta cualificada como si hubiera sido elegido entre los diez primeros del propio Draft.
‘Maximum qualifying offer’
La Maximum qualifying offer se circunscribe exclusivamente a jugadores que salen de su escala de novatos y que han jugado por tanto cuatro años. Sin bonus ni opciones de terminar el contrato antes, se trata de un acuerdo por cinco temporadas y el máximo salarial posible, más un incremento anual del 8 por ciento.
‘Two way contract’
La nueva fórmula de contrato que entra en vigor en la NBA para la 2017-18, los contratos duales o Two Way, también están presentes en la normativa de las ofertas cualificadas. Así, para este tipo de realidades, se presentan dos posibilidades: para los jugadores que salen de un contrato dual y no son elegibles para firmar otro de estas características, la oferta cualificada será del salario mínimo basado en los años de servicio, y al menos el salario que percibiría en la G League completamente garantizado; para los que sí son candidatos a seguir bajo el contrato dual un curso más, la Qualifying Offer es de por un acuerdo Two Way al uso, con 50.000 dólares completamente garantizados.