Dentro de las Mid Level Exception, para equipos por encima del límite salarial pero que no incurren en la multa del impuesto de lujo, la NBA articula la Non Taxpayer Mid-Level Exception. Al igual que la Taxpayer Mid-Level Exception, se trata de un mecanismo del que disponen las franquicias que han cometido excesos salariales y que están por encima del tope para firmar a jugadores ofreciéndoles más que el mínimo salarial.
La diferencia entre la Non Taxpayer Mid-Level Exception y la Taxpayer Mid-Level Exception es que en esta última, los equipos no sólo son pagadores del impuesto de lujo, sino que también se colocan por encima del Apron. En la Non Taxpayer Mid-Level Exception, los cálculos salariales se hacen tras llevarse a cabo la operación. Es decir, se aplica para equipos que tras añadir a un jugador mediante esta excepción, se sitúan por encima del tope salarial pero por debajo del impuesto de lujo.
Una franquicia no puede usar la Non Taxpayer Mid-Level Exception si ya ha ejercido en esa temporada la Taxpayer Mid-Level Exception o la Room Mid-Level Exception. Como se estima qué tipo de excepción debe usarse basándose en el resultado salarial que arrojaría la contratación, si una franquicia se va a ir por encima del Apron al fichar a un jugador, deberá usar la Taxpayer Mid-Level Exception y no la Non Taxpayer Mid-Level Exception.
La duración de los contratos vía Non Taxpayer Mid-Level Exception ha de ser de un máximo de cuatro temporadas. Al igual que con la Taxpayer Mid-Level Exception, esta excepción se puede dividir y usar para añadir a más de un jugador. La cantidad de la Non Taxpayer Mid-Level Exception para la 2017-18 era de 8,40 millones de dólares. Los contratos firmados a partir de este curso crecerán anualmente un 5 por ciento con respecto a esos 8,40 millones.