Los Heat son un equipo curtido a base de golpes. Simplemente se nota. Tras ver a Boston igualarles una ventaja de 3-0 y tener que ir al Garden para jugar el séptimo partido, no solo no dudaron, sino que firmaron esta noche un excelente encuentro para pasar por encima de los Celtics por 84-103 y llegar a las Finales de la NBA, donde espera Denver Nuggets.
Lo que han hecho los chicos de Erik Spoelstra no se puede definir como menos que hazaña. Llegaron a la postemporada con el octavo récord de la Conferencia Este e incluso cayeron en el primer partido del play-in ante Atlanta Hawks; salvaron el match ball ante Chicago Bulls y a partir de ahí han ido tumbando rivales, incluyendo a los dos mejores balances de su conferencia: Milwaukee Bucks y los mencionados Celtics.
Decir que se lo merecen también sobra. Son desde anoche el segundo equipo que alcanza la lucha por el anillo siendo octavo de su costa. Los primeros fueron los New Yorks Knicks de 1999 con Patrick Ewing, Latrell Sprewell y Allan Houston. Ahora los de Florida han escrito un nuevo apartado en los libros de historia de la Liga. He aquí el momento en el que reciben el trofeo como campeones del Este.
Para Miami son sus segundas Finales en cuatro años y una revancha respecto a lo que ocurrió en 2022. Sí, el año pasado se vieron en la misma situación y ante idéntico rival, pero en aquella oportunidad fueron los verdes quienes cantaron victoria en el Game 7. Esta vez la historia ha sido distinta, y eso que no han podido contar con Tyler Herro y que hasta la fecha no habían ganado nunca un séptimo partido en la carretera. Han completado la gesta.
El partido
Lo visto sobre el parqué del Garden sería difícil de explicar si no conociéramos ya a estos Celtics. Decir que son un equipo irregular y con largos apagones es quedarse cortos. Anoche, aunque empezaron por delante en el marcador y los Heat parecían atenazados, fueron incapaces de encontrar su ritmo hasta el punto de fallar los primeros 12 triples intentados… Es solo una dato, pero uno que explica que se quedasen en tan solo 84 puntos en el partido más importante del año.
Mientras los de Joe Mazzulla naufragaban, Miami fue entrando en ritmo justo a base de triples. Comenzaron fríos, pero un impresionante Caleb Martin que concluiría con 26 puntos y 10 rebotes empezó a anotar y de pronto los Heat eran una vez más ese equipo que te martillea poco a poco, pero sin descanso. Así, lograron ponerse hasta 17 puntos arriba en el primer cuarto, diferencia que llegó a ser recortada hasta los siete por Boston en la recta final del tercer periodo. Fue una reacción fantasma. Los Heat volvieron a apretar los dientes y mediado el último cuarto ganaban por 23 puntos. Game over.
Ya hemos mencionado a Martin, pero qué decir de Jimmy Butler. Sus años en Florida le están encumbrando como uno de los mejores jugadores de playoffs de la historia, y anoche no fue menos. Suyos fueron 28 puntos, 7 rebotes y 6 asistencias, llegando a meter hasta tres triples (14 de 28 hizo el equipo), números que unidos a los partidos anteriores le sirvieron para ser nombrado MVP. Tampoco faltó Bam Adebayo con 12 puntos, 10 asistencias y 7 rebotes, ni la aportación exterior de Max Strus, Caleb Martin y Duncan Robinson.
La lesión de Tatum
Los Heat fueron mejores, pero la primera jugada del partido también influyó en el resultado final según Jayson Tatum. La estrella de Boston se torció el tobillo izquierdo en una entrada a canasta y desde ese momento pareció estar algo molesto. Lo cierto es que no tuvo su mejor noche y concluyó con un doble-doble de 14 puntos y 11 rebotes tras realizar solo 13 lanzamientos a canasta.
Si Tatum estuvo algo apagado, Jaylen Brown no anduvo nada mejor. El ‘7’ de los Celtics tomó la responsabilidad ofensiva y se estrelló contra la defensa rival. Fueron 19 puntos sí, pero con un 8 de 23 en tiros de campo, incluyendo un más que doloroso 1 de 9 en triples. Para ser justos, nada se puede salvar anoche de los Celtics.
Espera Denver
Así es. A partir del dos de junio tendremos unas Finales inéditas y en las que los Denver Nuggets de Nikola Jokic parten como favoritos para conseguir el anillo. Los de Colorado llevan una semana descansando y a Michael Malone no le convence tanta espera. Miami por su parte arribará a Denver con euforia en sus venas. Nos espera una batalla espectacular.
(Fotografía de Adam Glanzman/Getty Images)