Milwaukee y Boston parecen arrancar la temporada como los dos grandes favoritos a ganar la Conferencia Este, y lo son en parte por movimientos que implican a Jrue Holiday. Los Bucks, por darle salida para hacerse con Damian Lillard; los Celtics, por aprovechar la situación para sumarlo a la plantilla. ¿Cambia esto las opciones del base de hacerse con un nuevo anillo? Él parece tenerlo claro.
«Creo que estando aquí estoy donde tengo más oportunidades de ganar» aseguró en su presentación con los de Massachusetts, en la que también reconoció que, una vez que se confirmó su salida de Milwaukee, esperaba que los Blazers lo enviaran a Boston. «Tenía ganas de venir aquí. A veces tienes que intentar no hacerte muchas expectativas en ese sentido porque te puedes llevar un golpe, pero ahora que he sido traspasado, estoy totalmente comprometido».
Holiday llega con una dosis extra de experiencia a la plantilla, pues cuenta en su haber con un anillo conquistado hacer dos años. Esto hizo que fuera preguntado acerca de cómo podía guiar por ese camino al resto de sus compañeros, que no saben lo que es ser campeones de la NBA pero que buscan lograrlo este año.
«Es más duro que nada de lo que hayas hecho antes. Vas a terminar cansado y exhausto, pero todo depende de quién tenga la fortaleza mental para sobreponerse a ello y generar las jugadas adecuadas en los finales de partido, y también de qué equipo esté más unido. El equipo que tenga más ganas es el que se lo va a llevar».
Por último, Jrue cerró su intervención hablando acerca de su nuevo entrenador: «Joe siempre es muy honesto y va de frente. Me gusta mucho por eso, y desde el principio me ha dicho que mi rol va a ser hacer de todo. Defender por toda la pista, controlar la situación en ataque, poner algo de calma para generar buenos tiros en los finales de partido… Pero creo que todo se resume en ganar. Se trata de mantener esta cultura ganadora de la que Joe es parte, y su forma de comunicarse conmigo ha sido genial».
(Fotografía de portada: Stacy Revere/Getty Images)