A un día de la esperada primera visita de la temporada de Kevin Durant a Oklahoma City, los Warriors sacaron un buen triunfo de Memphis. El equipo de Steve Kerr superó por 107-122 a un correoso rival que ya les había superado en dos ocasiones esta campaña. El torrente ofensivo de Golden State volvió a ser imparable, pero el hombre del partido solo anotó 4 puntos: Draymond Green.
El mejor partido de 4 puntos jamás visto
El ala-pívot hizo un partido absolutamente inédito en la NBA, al menos desde que robos y tapones son estadística oficial (1973). A sus 4 puntos, Green añadió 12 rebotes, 10 asistencias, 10 robos de balón y 5 tapones. Fue la primera vez que un jugador registra un triple-doble sin superar los 10 puntos. Alvin Robertson, en 1986, es el único jugador que llegó a sumar al menos 10 rebotes, 10 asistencias y 10 robos en un partido, aunque a la vez añadió 20 puntos.
Draymond Green también se quedó a solo un punto de conseguir el segundo «5×5» de su carrera NBA. Este hito se logra al sumar al menos 5 puntos, rebotes, asistencias, robos o tapones. Desde 2013, solo el propio Green ha conseguido lograr esta hazaña estadística, cuyo gran especialista en el siglo XXI fue Andrei Kirilenko, quien sumó 3 (2 de ellos con 7 días de diferencia) durante sus mejores años en Utah. De paso, también amplió su especial hechizo. Los Warriors tienen un balance de 20-0 cuando Draymond Green alcanza un triple-doble.
Aperitivo para Oklahoma City
#KlayThompson showing off his range on @CSNAuthentic. pic.twitter.com/PkpEpATQEp
— GoldenStateWarriors (@warriors) February 11, 2017
Las constantes interrupciones del ataque de Memphis durante la primera mitad (Green sumó 7 de sus 10 robos antes del descanso) cortó su ritmo de juego de forma imposible de superar. Los Warriors nunca perdieron su sólida ventaja en el marcador hasta el final del partido. Klay Thompson (36 puntos, con 8/15 en triples) fue el principal ejecutor de los Grizzlies, con Kevin Durant (24 puntos) y un rejuvenecido Andre Iguodala (22 puntos) de ayuda.
Los Grizzlies, pese a los 20 puntos y 9 asistencias de Mike Conley y los 17 puntos y 13 rebotes de Zach Randolph desde el banquillo, nunca pudieron darle la vuelta al duelo. Fue la primera derrota de Memphis ante Golden State tras sorprender al indiscutible líder de la NBA en dos ocasiones esta temporada. La ayuda de un triple-doble tan especial de Draymond Green fue más que bienvenida para Golden State, a punto de vivir un recibimiento infernal en Oklahoma City.