Primero fue Kobe Bryant. Luego ha sido Tim Duncan. Y ahora parece que se confirma otra retirada sonora en la NBA. Su nombre es Kevin Garnett, y han sido los propios Minnesota Timberwolves los que han oficializado su adiós a la práctica del baloncesto profesional.
Tras un verano repleto de rumores, el que fuera número 5 del Draft 1995 pondrá punto y final a una longeva carrera que ha durado veintiún años. Un extenso periodo repleto de una calidad infinita, mucho ‘trash talking‘ y alcanzando la gloria en 2008, cuando se coronó campeón de la NBA con los Boston Celtics.
Los seguidores de Minnesota se despedirán por segunda vez (aunque esta vez para siempre) del mejor jugador de su historia. Aquel que lideró a los T-Wolves a ocho apariciones consecutivas en los playoffs y una presencia en las Finales de Conferencia en la temporada 2003-04.
Garnett deja tras de sí 1462 partidos de temporada regular (970 con Minnesota) en los que ha anotado 26.071 puntos (19.201 con Minnesota) y capturado 14.662 rebotes (10.718 con Minnesota). Entre otros muchos galardones se alzó con el MVP del 2004, ha sido en 15 ocasiones All-Star, Jugador Defensivo del Año 2008, cuatro veces ha formado parte del Primer Mejor Equipo NBA, tres del Segundo y dos del Tercero.
Sus promedios de carrera han sido de 17,8 puntos, 10 rebotes, 3,7 asistencias, 1,4 tapones, 1,3 robos y 34,5 minutos sobre el parquet. Minnesota (1995-07), Boston (2007-13), Brooklyn (2013-15) y nuevamente Minnesota (2015-16) han podido disfrutar de uno de los mejores ala-pívots de la historia de la competición.