La lesión de Derrick Rose ha sido el principal tema de conversación en la NBA durante el fin de semana. Ver como el MVP de la anterior temporada ha pasado por un calvario de problemas físicos durante los últimos meses para que en el primer partido de Playoffs caiga lesionado por un periodo de entre 6 y 9 meses, ha impactado sobremanera en el mundo del deporte. Analizamos los hechos y consecuencias de lo sucedido el sábado en Chicago desde diferentes vertientes.
¿DEBÍA PERMANECER EN PISTA ROSE CON UN PARTIDO APARENTEMENTE SENTENCIADO?
El entrenador de los Bulls, Tom Thibodeau, ha sido fuertemente criticado desde algunos sectores por mantener a Rose en la cancha con poco más de un minuto por jugarse y una amplia ventaja. «Yo no trabajo sabiendo lo que iba a ocurrir, como vosotros [periodistas] sí hacéis», explicaba Thibodeau. «El marcador se estaba apretando». Rose se había perdido 27 de los 66 anteriores partidos de su equipo y estaba recuperando la forma tras una nueva lesión, por lo que aparte de conservar el resultado, Thibodeau pretendía que su base cogiera ritmo de juego.
Algunos entrenadores de la NBA fueron preguntados sobre este tema el domingo y el consenso general era que en situaciones así tienen una gran disyuntiva, ya que desean preservar el resultado pero también evitar posibles complicaciones a sus jugadores.
«Philly estaba haciendo un parcial a favor, y en baloncesto de Playoffs, nunca quieres dar confianza a un equipo rival», comentó Rip Hamilton. «No puedes dejarlos volver al partido o hacer un pequeño parcial, así que necesitábamos jugadores en pista que pudieran meter el balón en la canasta».
Como nota relacionada con este tema, hay que reflejar que Andrew Bynum, Pau Gasol y Kobe Bryant estuvieron en pista ante los Nuggets hasta que restaban 1:58 minutos a pesar de la amplia ventaja de su equipo (95-80 en ese momento).
TEMPORADA COMPRIMIDA Y BRUTAL; ¿EL LOCKOUT ES EL CAUSANTE DE LA LESIÓN?
Horas después de la lesión, jugadores, exjugadores y periodistas se apuntaban a la corriente de que la brutal temporada regular a la que se han sometido los jugadores por culpa del lockout (66 partidos en apenas cuatro meses) estaba siendo la causante de las graves lesiones de algunos atletas.
Por supuesto, gran parte de las críticias se dirigían a David Stern, el Comisionado de la NBA que había aprobado celebrar la temporada de esta forma. Lo que muchos no decían es que los jugadores como colectivo también apoyaron y aprobaron esta exigente temporada a cambio de no perder más dinero a causa del lockout.
Sin embargo, echando un vistazo a lo ocurrido en los últimos años, nos encontramos con una sorpresa. La de Derrick Rose ha sido la cuarta lesión de ligamento cruzado anterior en el año 2012 (66 partidos), pero la media de lesiones con desgarro de ligamento cruzado anterior en las anteriores cinco temporadas (de 82 partidos) es de 4,8, superior a lo visto hasta ahora en la presente temporada.
Este año los equipos han jugado tres partidos en tres días, cuatro en cinco, siete en diez e incluso nueve en doce. Periodos brutales de trabajo y esfuerzo que han puesto muchos cuerpos al límite. ¿Pero realmente se han roto los ligamentos cruzados de cuatro jugadores por ello?
Rip Hamilton garantizó lesiones importantes a comienzos de temporada al enfrentarse a un calendario que impedía entrenamentos y recuperación, pero que a cambio sí favorecia la competición sin apenas descanso. El escolta de los Bulls también ha pasado por varios problemas físicos que le hicieron perderse 38 partidos, pero nunca tuvo prisa por volver. «Esta temporada es criminal, ¿sabes? Tienes que aguantar la urgencia de volver porque tu cuerpo no va a conseguir estar sano si no le escuchas», dijo Hamilton hace escasas semanas.
Rose ha sufrido multitud de lesiones este año -seis- y como es sabido por todos el cuerpo humano está conectado; si tienes un problema en el pie puede que venga de la cadera y los problemas de la cadera tal vez vengan de la espalda. Pero también es cierto que sólo había jugado cinco partidos en los últimos 45 días.
El caso es que Rose, un jugador que había participado en 280 de los 286 partidos anteriores a este año, entró en una dinámica de lesiones de la que nunca pudo salir. Sus articulaciones han venido soportando brutales esfuerzos y torsiones tremendas debido a las características físicas y mentales de Rose y la peor de las lesiones llegó en el momento menos oportuno tras un periodo con unas características por el que nunca había pasado en su carrera.
LOS SUSTITUTOS
C.J. Watson (11,5 puntos y 4,5 asistencias) como titular y John Lucas III (10,4 puntos y 3,0 asistencias) como suplente, se encargarán de ocupar la posición de Rose en la alineación que presenten los Bulls en lo que resta de Playoffs. «Simplemente tenemos que responder», decía Lucas. «Recuperarnos como hemos hecho todo el año. Hemos respondido a todos los desafíos este año. Lu [Luol Deng] lesionado, Derrick lesionado, C.J. de baja, todos hemos dado un paso al frente. Esa es nuestra mentalidad».
Según datos de ESPN, a los Bulls les ha ido mucho mejor con Lucas en pista que con Watson a pesar de que éste sea el segundo base tras Rose. Por cada 100 posesiones, los Bulls fueron 16 puntos mejores con Lucas que con Watson en el parquet.
EL FUTURO DE CHICAGO BULLS PARA ESTA TEMPORADA
Los aficionados en las redes sociales, los medios de comunicación y casi todos los analistas se apresuraron a calificar como nulas las opciones de que en Chicago se pudiera celebrar un campeonato esta temporada tras la lesión de Rose. La creencia general es que los Bulls no deberían tener problemas para acabar con Philadelphia, pero a partir de ahí surgen en el horizonte enemigos como Boston, Atlanta y especialmente Miami, un muro que muchos piensan que los Bulls no podrán superar sin su estrella. Pocos recuerdan que en dos partidos jugados este año entre ambos equipos sin la presencia de Rose hubo una victoria para cada franquicia.
Tom Thibodeau quiso levantar el ánimo de sus jugadores en el entrenamiento del domingo. «Derrick no es sólo un gran jugador, es un gran compañero, una gran persona, pero [esto] no es una sentencia de muerte«, explicaba el técnico de los Bulls. «No es una sentencia de muerte para él, no es una sentencia de muerte para nuestro equipo. Va a volver. Volverá mejor que nunca. Esto es como es y tenemos que aceptarlo así».
Los compañeros de Rose también han aceptado su destino y no lo rehuyen. «No vamos a dejar que nadie nos diga qué es lo que va a pasar», dijo Joakim Noah. «Por supuesto que es duro perder a Derrick. Lo siento por él, pero no podemos compadecernos. El equipo al completo tiene que dar un paso al frente». Eso sí, el pívot de origen francés reconoce que es un contratiempo importante. «Nuestro margen de error es bastante más pequeño con Derrick fuera«.
Los Bulls con Rose en pista han completado un parcial de 32-7 en temporada regular; sin él, un 18-9 más modesto pero que habla muy bien del equipo, teniendo en cuenta que algunas de esas victorias llegaron ante rivales como Miami, Boston, Orlando, Atlanta, New York y Philadelphia.
¿VOLVERÁ A SER EL MISMO JUGADOR?
La sexta lesión de la temporada para Derrick Rose ha sido la más devastadora de todas. El nativo de Chicago tendrá que pasar por un duro proceso de recuperación del que se tienen muchas garantias pero que no aseguran que no puedan quedar algunas secuelas o que el jugador vuelva a ser exactamente el mismo. Para un jugador tan físico como Rose, que ha puesto su cuerpo al límite siempre que ha jugado, la lesión es peligrosa no sólo por el tiempo que le mantenrá fuera del baloncesto.
Su rapidez, cambios de dirección y penetraciones a canasta plantando con una brutal fuerza los dos pies, pueden sufrir alteraciones cuando esté recuperado y pueda volver a jugar. La rodilla de un jugador nunca queda igual tras una intervención de esta magnitud, pero a favor de Rose cuenta su edad -23 años- y una capacidad de sacrificio y trabajo insuperable en la NBA según cuentan compañeros y preparadores de diferentes equipos. Hace unas semanas hicimos un repaso a como habían evolucionado las carreras que los jugadores que habían sufrido la misma lesión que Rose.
EL PERIODO DE RECUPERACIÓN
El tiempo que un jugador que sufre un desgarro del ligamento cruzado debe permanecer sin regresar a la competición oscila entre los seis y nueve meses. Esta lesión requiere intervención quirúrgica, pero no se puede realizar hasta que no hayan pasado unas semanas -entre dos y cuatro- tras haberse producido el percance. Es en ese momento cuando se comprueba exactamente el estado de la rodilla y se pueden marcar plazos de forma más aproximada.
En cualquier caso, se da por descontado que Rose se perderá los Playoffs, Juegos Olimpicos, pretemporada NBA y muy probablemente entre uno y dos meses de la temporada regular 2012-13.
«Todavía no hay nada definitivo», comentó Tom Thibodeau. «Todavía tiene que hablar con los doctores, [el preparador] Fred [Tedeschi] y después trazar el plan. Normalmente hay un periodo de espera y después le practicarán la cirugía».
LOS JUEGOS OLÍMPICOS
El percance de Rose también supone un problema para la selección estadounidense, que ve como otro jugador se cae de forma forzada de la preselección para Londres 2012. Los lesionados Chauncey Billups, Dwight Howard y LaMarcus Aldridge, y el inactivo Lamar Odom ya están descartados, dejando junto a Rose la lista inicial en sólo 15 jugadores.
Jerry Colangelo declaró unos días antes de la lesión de Rose que la preselección no sería ampliada pese a las bajas sufridas, pero habrá que comprobar si este nuevo varapalo no hace cambiar de opinión al equipo olímpico norteamericano. Por el momento parece que Chris Paul, Deron Williams y Russell Westbrook ocuparán la rotación en el puesto de base sin la necesidad de un nuevo jugador para ese puesto.
POLÉMICA NIKE-ADIDAS
No sólo se lesionó de gravedad el sábado Rose, también lo hizo Iman Shumpert. Ambos calzaban zapatillas adidas por lo que algunos iniciaron una morbosa polémica para dejar mal a la marca alemana.
Pero hubo una persona que se alejó demasiado de lo políticamente correcto. Jason Petrie, un diseñador de Nike que es el principal hombre detrás del modelo de zapatillas de LeBron James, escribió un tweet fuera de lugar:
You got one guy only getting stronger, and one guy breaking down before our very eyes. You chose poorly Pooh…#shouldasignedwithNIKE #GWS
— Jason Petrie (@sevenzro1) abril 28, 2012
Traducción: «Un jugador cada vez más fuerte y otro tipo que se rompe ante nuestros ojos. Elegiste mal Pooh… #deberíashaberfirmadoconNIKE #GWS (Recupérate Bien Pronto)
Pooh es el sobrenombre con el que la madre de Rose llamaba a su hijo y Rose es la principal estrella de adidas desde que llegó a la NBA, habiendo renovado su contrato con la empresa alemana hace pocos meses, por lo que estaba claro que Petrie se refería a Rose.
Su tweet provocó una avalancha de críticas a las que el diseñador respondió desafiante hasta que el domingo, tal vez aconsejado por su entorno, pidió perdón.
Nike no tardó en mostrar el desacuerdo con su empleado mediante un comunicado oficial: «Como marca apasionada con el deporte, sabemos que alto nivel de intensidad que ha puesto cada atleta durante esta temporada de baloncesto y respetamos la dedicación necesaria para competir. Uno de nuestros diseñadores de zapatillas publicó comentarios online que creemos inapropiados, y desde entonces él ha pedido perdón. Deseamos una pronta recuperación a quien esté lesionado.»
Ahora quedará por ver si Jason Petrie seguirá concediendo entrevistas como trabajador de Nike y diseñando un modelo tan icónico como es la serie de zapatillas de LeBron James.
POLÉMICA POR LAS ZAPATILLAS
Hay quien culpa de la lesión de Derrick Rose a las zapatillas adidas del jugador, uno de los modelos más ligeros del mercado para practicar baloncesto y la lesión de Shumpert aparece como «aliada» de esta teoría. Pero Shumpert estaba jugando con las adidas Top Ten, un modelo del año 2000 con bastante menos tecnología que la disponible en las adizero Rose 2.5. Además, la ligereza de las zapatillas de Rose no es escandalosa ni única; sin ir más lejos Kobe Bryant jugó la temporada 2009-10 (campeón NBA) con una zapatilla menos pesada.
A lo largo de la historia algún entrenador como Phil Jackson se ha atrevido a culpar a ciertos modelos de zapatillas como causantes de lesiones, pero en este caso particular la polémica parece fuera de lugar.
UN VARAPALO ECONÓMICO PARA ADIDAS
Primero fue Chauncey Billups. Después Dwight Howard. Ahora llega la lesión de Rose. Tres jugadores importantes representados por la marca alemana que iban a participar en los Juegos Olímpicos en una selección estadounidense plagada de estrellas de Nike, ya no podrán estar en el foco deportivo mundial del próximo verano.
adidas sólo posee el 4,5% del mercado de zapatillas de baloncesto en Estados Unidos según SportsOneSource.com, mientras que Nike posee el 91%, incluyendo un 58% en posesión de la marca Jordan, propiedad de Nike. El acuerdo por 13 años de al menos 185 millones de dólares que pagará adidas a cambio de explotar la imagen de Rose, tiene como objetivo que Rose pueda convertirse en un atleta tan trascendete para la marca alemana como Jordan lo fue para Nike, pero el varapalo que supone la no presencia de Rose en Londres 2012 no ayudará a conseguir los objetivos de la empresa.
Y LO MÁS IMPORTANTE, ¿CÓMO LO ESTÁ LLEVANDO ROSE?
«Tan bien como se pueda llevar en estas situaciones», respondió Thibodeau a la pregunta. «He hablado con él varias veces, lo superará. Es un tipo con una mente muy fuerte». Por el momento no ha habido ningún tipo de declaración ni comunicado por parte del jugador o sus representantes.