Koby Altman, presidente de operaciones de los Cleveland Cavaliers y por tanto hombre al mando de las oficinas de la franquicia, ha sido detenido este fin de semana por agentes de la Patrulla de Carretera del Ohio. El ejecutivo ha sido acusado de conducir bajo los efectos del alcohol, y podría enfrentarse a una suspensión o a una multa si los cargos se confirman.
Según han asegurado los propios agentes, solicitaron a Altman que detuviese su vehículo al ver que no estaba respetando las líneas de su carril, y fue entonces cuando vieron que presentaba síntomas de embriaguez. Antes de arrestarlo, le ofrecieron la posibilidad de realizar un test de alcoholemia en el lugar de la detención, pero el de los Cavaliers se negó y tuvo que acompañar a los agentes.
«Somos conscientes del incidente que implica a nuestro presidente de operaciones Koby Altman. Ahora mismo nos encontramos recopilando información al respecto, de modo que no tenemos nada más que comentar por ahora» afirmaron desde la franquicia.
Altman ha sido miembro de las oficinas de Cleveland desde el año 2012, y fue en 2017 cuando tomó las riendas de las mismas reemplazando a David Griffin como el jefe en la toma de decisiones. Bajo su mandato, los de Ohio han logrado recomponerse tras la segunda salida de LeBron James y llegar a ser un equipo de playoffs, lo que le llevó a renovar como presidente hasta el año 2028.
(Fotografía de portada: Jason Miller/Getty Images)